Cretividad sin recursos

En la Newsletter de este mes de Advertty, he descubierto un vídeo que puede servir a mucha gente de inspiración. En estos momento complicados, en los que la inversión publicitaria cada día es menor, este grupo ha conseguido hacer un videoclip, versionando la conocidísima canción «Somebody that I used to know» , sencillamente magnífico: una guitarra, cinco personas y mucho talento.

A continuación os dejo el videoclip, espero que lo disfrutéis, al menos, tanto como yo:

Javier Arza será el responsable del Manual de Actuación en Redes Sociales en relación a los empleados de una empresa. También nos enseñará a utilizar Facebook para campañas de Marketing.

Javier Arza será el responsable del Manual de Actuación en Redes Sociales en relación a los empleados de una empresa. También nos enseñará a utilizar Facebook para campañas de Marketing..

Anuncio de Loewe – Clase alta de lo más baja

Estos días hemos podido ver como una campaña de una conocida marca agitaba las redes sociales. La campaña en cuestión la ha lanzado la marca Loewe, que ha querido dirigirse a un público más joven pero sin perder una serie de valores que siempre han ido ligados a la marca.

La intención era buena: tratar de que unos cuantos jóvenes explicaran lo que loewe significa para ellos, a qué lo asocian, qué recuerdan de la marca… Lo que parece que quieren transmitir con sus mensajes es:

– Que la marca es de alta calidad.

– Que lleva muchos años en el mercado, es decir, la tradición de la marca.

– Que es una marca española.

La intención de la campaña parece clara: abrir la marca a públicos más jóvenes. El caso es que parece que no han retratado demasiado bien a los jóvenes de hoy en día, y buena muestra de ello a sido la avalancha de comentarios jocosos en las redes sociales, lo que ha hecho que el hashtag   #loewe se haya convertido en Trend Topic mundial. Desde luego si lo que querían era tener un impacto, aunque no sea positivo, lo han conseguido. Sin olvidar que los jóvenes del anuncio son actores, el público al que han tratado de dirigirse no se ha sentido identificado con este anuncio, algo bastante lógico si tenemos en cuenta que:

1. Los comentarios son absurdos, no hay ni una sola frase que tenga algo de profundidad.

2. Tratan de hacer verdades absolutas de banalidades «Lo más guay de España que no tiene otro país son las españolas»  

3. Los personajes parecen niños pijos, clasistas, egocéntricos, pretenciosos y estúpidos, y lo peor de todo es que van de modernos que marcan tendencia.

4. Se produce una extraña mezcolanza entre señoritos, nuevos ricos y pijoborrokas que llama poderosamente la atención…

Lo que más me gusta es la música de circo con la que han ambientado el anuncio, la verdad es que viendo los personajes que aparecen en el anuncio, es bastante acertada.

Cómo he comentado anteriormente la respuesta de los jóvenes en las Redes Sociales no se ha hecho esperar, ridiculizando la campaña con multitud de comentarios ingeniosos:

«¿Qué pasa cuando mezclas ‘Mujeres Ricas’ y ‘Hermano Mayor’? Que tienes el nuevo spot de Loewe»

«La música del circo del anuncio de Loewe ya te va dando una pista de lo que es»

«Por algo ‘El diablo se viste de Prada’ y no de Loewe»

«¿Está de moda ponerse las gafas encima de un pelo larguisimo al estilo del primo «La cosa» de la familia Adams?»

«¿Una del anuncio de #Loewe dice que la marca le recuerda a su familia y a sus amigos?¿Qué clase de amigos y familia tiene?»

Esto es solo una muestra de la opinión de ese público al que han tratado de dirigirse. Resulta que miles de personas que jamás se compraron un Loewe, ni tenían dinero para hacerlo, han perdido el respeto a la marca.

Resumiendo: está bien intentar abrir una marca a nuevos públicos, pero antes de dirigirte a ellos debes de investigar cómo son estas personas, ya que existe una notable diferencia entre jóvenes estúpidos parecen no ser capaces de atarse los zapatos solos y una generación que en la que todavía quedan personas con inquietudes, sueños y formas de pensar muy diversas, una generación que viene con internet debajo del brazo y que no duda en utilizarlo en estos casos para hacerse ver, aunque cómo he dicho antes, jóvenes hay de todos los tipos, seguramente hasta cómo los que vemos en el anuncio…

¿En Madrid no hay Playa? Para los juegos parece que sí

Hola a todos!

Este es mi primer post, y en lugar de dar la bienvenida y esperar que os guste mucho y esas cosas, quiero comenzar directamente con un asunto de lo más trend topic: Madrid se presenta a la candidatura del 2020.

La verdad es que la noticia no tiene ningún tipo de interés para este blog, ya que ya hay suficientes espacios deportivos que hablan sobre el tema, la noticia para este apartado es que la candidatura ha presentado su imagen. Lo de imagen es por decir algo, ya que nos encontramos ante algo que oscila entre lo hortera, lo choni y lo ridículo.

Lo bueno es que  ya empezamos a escuchar multitud de opiniones respecto al logo, por un lado las críticas:  no se entiende,  parece un expositor de chanclas, que parece que pone 20020… En muchos casos no les falta razón, pero ahora vamos con eso. Por otra parte están los enteraos que quieren darle a todo un carácter que va más allá de lo que los simples humanos llegan a entender, y explicando que esta pieza evoca a los anillos olímpicos, y que la tipografía elegido pretende darle un aspecto de unión,  fraternidad… hasta he llegado a leer que los dos círculos evocan a la puerta de Alcalá… desde luego hace falta tener imaginación y mucha cara dura…

En mi opinión el logo es el producto destrozado de una pieza que valía la pena y cuya transformación da como resultado algo grotesco. Dentro de este mundo cada día es más normal lo ocurrido: un profesional hace un diseño, que sigue un par de reglas muy sencillas: Ha pensado y ha razonado el porqué debe ser así desde el punto de vista publicitario. Luego ese diseño se presenta, y un comité de excelentísimos inútiles, decide dar su opinión. Cuando esto sucede ocurre algo de lo más curioso y es que el más tonto es el que más alto habla, no vayan a pensar que no tiene nada que decir. Ante eso se oyen cosas como: Es que no me gusta, es que no pega, es que yo creo que si cambias los colores y mueves eso…

El resultado es siempre similar: se destroza la pieza creativa y se crea algo como esto:

Podría estar media noche explicando la cantidad de fallos que tiene, lo que denota, lo que falta, la TIPOGRAFÍA (esto ya es de escándalo), pero prefiero que comparéis la pieza original con el resultado final:

Iba a comentar que «no hay color», pero ya está bien por hoy, que la agencia que ha hecho la extravagante transformación tampoco tendrá toda la culpa… Una sola reflexión: Por favor, respetar el trabajo de los profesionales, nos dedicamos a la imagen porque sabemos de esto y nos gusta.